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Algunas de sus enfermedades son: hígado graso, hepatitis alcohólica, cirrosis, cáncer.


Escrito para Fitness por Ana Cecilia Becerril

Las disfunciones del hígado se dividen en dos grupos:

La vesícula biliar es una pequeña bolsa de tejido muscular en la que se almacena la bilis, una secreción digestiva viscosa verde-amarillenta, producida por el hígado. La bilis sale del hígado a través de los conductos hepáticos, derechos e izquierdos, que se unen para formar el conducto hepático común. Luego, este conducto se une a otro, que viene de la vesícula biliar, denominado conducto cístico, para formar el conducto biliar común. Este se une al intestino en el esfínter de Oddi, unos centímetros por debajo del estomago.

Casi la mitad de la bilis secretada entre las comidas llega hasta la vesícula biliar a través del conducto cístico; el resto pasa directamente al intestino delgado. Cuando una persona come, la vesícula biliar se contrae y vierte en el intestino la bilis almacenada de manera que se facilite la digestión de las grasas y de ciertas vitaminas.

La bilis está compuesta de sales biliares, electrolitos y pigmentos biliares tales como la bilirrubina, el colesterol y otras grasas o lípidos; permite la eliminación de ciertos productos de desecho, en particular los pigmentos producidos por la destrucción de los glóbulos rojos y el exceso de colesterol, y contribuye a la digestión y a la absorción de las grasas. Las sales biliares aumentan la solubilidad del colesterol, de las grasas y de las vitaminas solubles para facilitar su absorción por el intestino.

La hemoglobina producida en la destrucción de los glóbulos rojos se convierte en bilirrubina, que es el principal pigmento de la bilis y pasa a esta como un producto de desecho.

En la bilis se secretan también algunas proteínas que tienen un importante papel en la función biliar. Los cálculos biliares pueden obstruir la salida de la bilis desde la vesícula biliar, causando dolor o cólico biliar o la inflamación de la vesícula biliar o colecistitis. Estos cálculos también pueden pasar de la vesícula al conducto biliar y causar ictericia (coloración amarilla de la piel) bloqueando el flujo normal de la bilis hacia el intestino.

Los tumores y otras causas menos frecuentes pueden igualmente obstruir el flujo normal de la bilis.

Se pueden realizar varios exámenes para determinar las posibles alteraciones del hígado y de la vesícula y vías biliares. Entre los más importantes están los exámenes de sangre conocidos como pruebas de función hepática.

Según el problema que posiblemente tiene el paciente, el médico también puede ordenar exámenes de imágenes, como ecografía, tomografía, resonancia, etc. También es posible obtener una muestra de tejido hepático para examen al microscopio o biopsia.

Las enfermedades hepáticas pueden manifestarse de formas muy diversas. Los síntomas particularmente importantes incluyen la ictericia, la colestasis, el aumento de volumen del hígado, la hipertensión portal, la ascitis, la encefalopatía hepática y la insuficiencia hepática. Para diagnosticar una enfermedad hepática, el medico toma en cuenta la descripción que el paciente hace de sus síntomas y realiza una exploración física, complementando con estudios de laboratorio y gabinete.

Principales síntomas hepáticos

Sangre

Hormonas

Corazón y vasos sanguíneos

General

El hígado graso, la hepatitis alcohólica, la cirrosis, la cirrosis biliar primaria, la colangitis esclerosante primaria, déficit de alfa1-antitripsina, trastornos vasculares del hígado, tumores hepáticos benignos o malignos o cancerosos, pueden resultar de una lesión del hígado.

Muchos factores pueden producir una lesión en el hígado, pero en algunas de estas enfermedades se desconoce el origen de la lesión.

El pronóstico y tratamiento de la enfermedad depende del diagnóstico precoz e impedir la lesión celular para evitar llegar al trasplante de hígado.

En el caso de la vesícula biliar las alteraciones mas frecuentes son los cálculos, cuyo tratamiento en la mayoría de los casos es la extirpación de la vesícula, si no hay sintomatología entonces no requiere de tratamiento.